Conversatorio sobre los desafíos de la inserción laboral de la juventud

20 de Junio de 2019

 

Rodrigo Barraza, Coordinador del IDHES. Fotografía cortesía de CRS.

 

Con el propósito de compartir y dialogar sobre los aprendizajes y experiencias adquiridos al trabajar con la juventud salvadoreña e incentivar a los distintos sectores del país a establecer alianzas para crear oportunidades en pro de la juventud, Catholic Relief Services (CRS), con el apoyo del PNUD, organizó el conversatorio “Futuro de la Juventud Salvadoreña”.

El espacio se realizó en el marco del proyecto Caminos de la Juventud de CRS, financiado por el Laboratorio de Innovación del Banco Interamericano de Desarrollo, el Instituto Salvadoreño de Formación Profesional, Enlace y fondos propios de CRS.

El proyecto impulsa el modelo Jóvenes Constructores, que tiene una década de estarse implementando y ha beneficiado a más de 7,000 personas jóvenes, de las cuales el 63% se ha insertado productivamente en la sociedad, a través de un empleo, regreso a los estudios o emprendimiento.  El objetivo principal del programa es fomentar la resiliencia social y económica para los jóvenes en riesgo en sitios específicos de siete países de Centroamérica.

En el conversatorio se abordaron los retos de inserción laboral que enfrenta la juventud salvadoreña y se presentaron los hallazgos y recomendaciones del Informe sobre Desarrollo Humano El Salvador 2018 ¡Soy Joven! ¿Y ahora qué?, del PNUD.

Una de las principales conclusiones fue que las personas jóvenes, particularmente las que se encuentran en situación de riesgo, requieren de oportunidades vinculadas al compromiso de instituciones, empresas y comunidades.

“Invertir en las personas jóvenes es clave para el desarrollo sostenible. El IDHES y la experiencia del Proyecto Caminos para la Juventud evidencia que es importante que, de ahora al año 2030, se hagan inversiones en la juventud, particularmente en salud, educación y empleo, para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible”, enfatizó Rodrigo Barraza, coordinador del IDHES del PNUD.

Según el IDHES, solo el 16% de las personas jóvenes tiene un trabajo decente. A su vez, quienes están dentro del mercado laboral, enfrentan desafíos relacionados a la violencia. Por ejemplo, 16.5% ha alterado su trayecto o rutina al trabajo por inseguridad, 11.5% ha recibido amenazas para dejar su trabajo o cerrar su negocio y 23.1% de los jóvenes asegura haber experimentado discriminación laboral.

El informe también menciona que la violencia ha llevado a las empresas salvadoreñas a adoptar medidas de protección en sus procesos de contratación y a ser más exigentes al momento de contratar a personal joven. Estas prácticas, que buscan ayudar a proteger los ambientes laborales de la influencia de delincuencia e inseguridad, resultan en detrimento del desarrollo de la juventud.

 “No puede haber desarrollo sin seguridad. Desarrollo humano y seguridad ciudadana son dos caras de una misma moneda”, enfatizó Barraza.

A pesar de estos retos, el IDHES 2018 señala que las personas jóvenes demuestran altos niveles de resiliencia frente a la violencia. “Las personas jóvenes se caracterizan por ser resilientes, a pesar de tener un entorno muy adverso, salen adelante”, mencionó Rafael Pleitez, Representante Residente Auxiliar del PNUD.

En el conversatorio se contó con la participación de representantes de empresas y jóvenes graduados del Programa Jóvenes Constructores, quienes desde sus propias experiencias compartieron factores de éxito y desafíos que enfrenta la juventud en la inserción laboral.

Las y los representantes del sector privado enfatizaron que valoran la autoconfianza, puntualidad, comunicación efectiva y habilidades blandas como trabajo en equipo al momento de contratar a una persona joven.

Las y los jóvenes graduados del programa señalaron que entre los desafíos que enfrentan en el acceso al trabajo está la discriminación por el lugar donde viven, particularmente si son zonas relacionados con agrupaciones delictivas, y que los perfiles exigen en ocasiones muchos requisitos para su edad. Su recomendación a las empresas fue generar más oportunidades de pasantías laborales y brindar capacitaciones sobre cómo crear una hoja de vida adaptada a las nuevas demandas del sector laboral.