Organizaciones basadas en la fe son pieza clave en los procesos de inserción

29 de Septiembre de 2021

Panadería La Esperanza, es un emprendimiento apoyado por proyecto Pionero, a través de las organizaciones Basadas en la Fe (OBF)

En el marco de la tercera entrega del foro Explorando Caminos del Proyecto Pionero en Inserción social impulsado por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), tres organizaciones Basadas en la Fe (OBF) compartieron sus experiencias sobre su trabajo en apoyo a población en fase post penitenciaria.

El tema de esta sesión fue “Casas de paso para la inserción: Experiencias, gestión y oferta de servicios”, en la cual participaron como ponentes el pastor de la Iglesia Eben Ezer en San Salvador, Nelson Moz; el representante de la Fundación Moody con sede en Santa Ana, pastor Kenton Moody; y el representante de la Fundación Amity, Daniel Rodríguez, quienes dialogaron desde la experiencia de una de las organizaciones que lideran.

Las casas de paso son espacios que promueven el crecimiento personal, el apoyo social y la generación de nuevas rutinas individuales y colectivas de cara a la inserción social. Las iglesias tienen un rol destacado en esta dinámica.

Los ponentes destacaron la importancia de la educación formativa, la elaboración de un plan de vida y el apoyo de las iglesias en este sentido; además dieron a conocer sobre sus métodos de organización, así como los retos que enfrentan para continuar dando apoyo a la población en proceso de inserción.

“Como PNUD se puede y creemos que es importante apoyar a las iglesias, fortalecer las capacidades de las y los que participan y sabemos que la fe es importante para un verdadero cambio…por muy alta que sea la montaña siempre hay un camino que lleva a la cima y estamos construyendo ese camino”, indicó la Representante del PNUD, Georgiana Braga Orillard, quien dio las palabras de apertura al espacio.

De acuerdo con la experiencia del pastor Moz, las solicitudes más recurrentes de la población en proceso de inserción en un inicio eran la provisión de servicios de guarderías, de salud y de vivienda. “Los recursos son limitados por lo que procuramos que el perfil de quienes son apoyados en nuestro centro sean personas que no cuentan con apoyo familiar. Actualmente hay dos retos grandes en este tipo de proyecto, el área económica y la empleabilidad de los jóvenes y adultos lo cual se dificulta por aspectos como los tatuajes y los antecedentes penales”, afirmó

En la experiencia de la Fundación Moody, el proyecto inició con cinco participantes y su enfoque era brindar apoyo en la rehabilitación del alcoholismo y drogadicción. Una alianza con el Instituto Salvadoreño de la Niñez y adolescencia (ISNA) ha permitido que jóvenes y adolescentes concluyan sus últimos 2 o 3 años de cumplimiento penas en este programa, que además les permitió capacitarse en diversos emprendimientos, entre otras actividades educativas.

“La aceptación social, la fe y el acompañamiento son los ingredientes que llevan al éxito a estas casas de paso” indicó Daniel Romero, de la Fundación Amity. Este ministerio cuenta con 20 programas dentro de un centro penitenciario y 3 casas de paso con capacidad para 184 hombres y una más con capacidad para 55 mujeres.

El foro Explorando Caminos es un espacio de reflexión entre representantes de instituciones y organizaciones que participan en la búsqueda de soluciones a los desafíos de la inserción social en El Salvador.